Es indudable que el control judicial de constitucionalidad adolece de un serio déficit político o representativo que suele ser llamado "dificultad contramayoritaria" (curiosamente, uno de los primeros en identificar dicho déficit fue Carl Schmitt antes de decidirse por el nazismo). Habría que modificar dicho control, sin duda. Pero mientras tanto sea parte de nuestro derecho constitucional hay que seguirlo, lo cual es otro pilar de la democracia. El Poder Ejecutivo no debería enceguecerse en su lucha contra Clarín y por extensión contra el Poder Judicial. Al proceder de este modo sólo logra que un grupo como Clarín pueda darse el lujo de victimizarse. Por si todavía quedaran dudas al respecto, hasta los jueces designados por el kirchnerismo en la Corte Suprema de Justicia han mostrado su preocupación por la interferencia del Poder Ejecutivo en el Judicial, tal como nos lo recuerda un circunspecto senador jauretchiano (click). En realidad, con un poco de paciencia y sentido común, sólo queda esperar hasta que la Corte Suprema se expida sobre la constitucionalidad de la así llamada Ley de Medios. Y después, y antes ciertamente también, habría que gobernar.
Habíamos usado este mismo video en relación a otro tópico en el que estaba involucrado el diablo mismo (click). Nuevamente, la cuestión es si el diablo, sea los mismos militares que cometieron graves violaciones de derechos humanos, o incluso Clarín, un grupo que tuvo una activa participación en los años dictatoriales, tienen derechos. La respuesta es que el diablo tiene los mismos derechos que cualquier otro ser humano, fundamentalmente porque es un ser humano, y tiene dichos derechos hasta tanto no los pierda, lo cual ocurre sólo mediante sentencia firme de un juez, al menos bajo un régimen que suele ser llamado democrático.
"A man for all seasons" (1966).
[Esposa de Tomás Moro] Arréstalo! - [Tomás Moro, excelentemente interpretado por Paul Scofield] ¿Por qué? -Es peligroso! - [Roper] Calumnias. Es un espía! - [la hija de Tomás Moro] Ese hombre es malo! -No hay una ley en contra de eso. -La ley de Dios! -Entonces Dios puede arrestarlo. -Mientras hablas, él se fue! -Debería irse, si él fuera el Diablo, hasta que viole el derecho. -¿Ahora le das al Diablo el beneficio del derecho? -Sí, ¿qué harías vos? ¿Cortar un camino por el medio del derecho para ir en búsqueda del Diablo? - Sí, cortaría cada ley en Inglaterra para hacer eso. -Y cuando la última ley estuviera cortada y el Diablo se volviera contra vos, ¿dónde te esconderías, Roper, cuando todas las leyes ya no existirían? Este país está plantado con leyes de una costa a la otra... Las leyes humanas, no las de Dios, y si vos las derribás, y vos sos justo el hombre para hacerlo... ¿realmente pensás que podrías mantenerte en pie contra el viento que soplaría entonces? Sí, le doy al Diablo el beneficio del derecho en aras de mi propia seguridad.
8 comentarios:
Primero que nada el Ejecutivo en términos de ley de medios se ha manejado SIEMPRE siguiendo los parámetros judiciales y constitucionales. La crítica de la "presión" al poder judicial se torna un poco absurda. Es un poder que siempre tiene por así decirlo "presiones", de echo dos jueces que firmaron el fallo para la extensión de la cautelar fueron invitados a Miami por el señor Magnetto, pero claro eso no es "presión", es otra palabra...
recordemos que es una ley votado por amplia mayoría en el parlamento y que hace tres años que que no puede aplicarse uno de sus artículos más esenciales por una supuesta inconstitucionalidad. El articulo que regula los monopolios justamente.
Además Zaffaroni desmintió la "presión" del Ejecutivo.
Sin duda, el Diablo invita a los jueces a Miami. Pero no hay que olvidar que la misma Cámara, sin los jueces recusados, y con los dos camaristas del fuerto contencioso administrativo que habían sido pedidos por el Poder Ejecutivo, decidió desestimar el pedido de recusación. Highton de Nolasco y Argibay, dos jueces que no pueden ser considerados anti-kirchneristas, suscribieron el pedido de la corporación judicial para que el Poder Ejecutivo, en realidad, para que quien fuera, deje de presionar o, como bien lo dijo Zaffaroni, "alegue de oreja". Por supuesto que los jueces pueden equivocarse, incluso la Corte. Pero la que decide sobre la constitucionalidad de las leyes es la Corte Suprema, no el Poder Ejecutivo, ni tampoco el Legislativo, entre cuyos miembros se encuentra el senador mencionado en la entrada. Encima, la conducta del gobierno permite que la corporación judicial hasta se dé el lujo de mostrarse como campeona de la independencia judicial. Es curioso que Clarín no fue óbice para la democracia o derechos humanos cuando trabajaba con Kirchner, ni tampoco lo fue cuando se puso en contra y Cristina sacó el 54 %, aunque obviamente lo fue durante la dictadura y ahora. Encima, se trata de una ley que puede ser satisfecha una vez que Magnetto se divida con un familiar el grupo, tal como lo propuso Vila por ejemplo, sin entrar, por ejemplo, en el caso Telefónica. Semejante ley no puede ser seriamente considerada como anti-monopólica, pero permite al menos que podamos sentir bien sobre nosotros mismos. Ojalá termine pronto la farsa y podamos concentrarnos en los problemas más urgentes.
Nos olvidamos de agregar que Lorenzetti tampoco podría ser seriamente considerado antikirchnerista.
acaso no se deba tanto a su condición de persona (en tanto participe de un régimen democratico y, agregaría, republicano) lo q le permita al representante del diablo contar con las garantías q le depara el estado de derecho, sino a la imposibilidad de toda autoridad, tanto por un límite epistemologico o, mejor, por la provisionalidad a la que lo condena la democracia, de atribuirle sin más dicha representación. ¿acaso el haber ganado una elección presidencial borra el hecho de que "el diablo" (ese q colaboró con la "dictadura") fue un socio fundamental del "santo de la espada" durante su período de gestación?
Sin duda, las consideraciones políticas no son favorables para el kirchnerismo. Quizás alguien pueda alegar que la alianza con Clarín fue estratégica, tal como alguna vez hasta el comunismo soviético tuvo que pactar con el nazismo alemán. Pero la cuestión aquí y ahora es esencialmente jurídica, y en términos jurídicos la reacción de incluso una Corte que no puede ser tildada de antikirchnerismo así como la idea de que es sedición presentar un recurso nos dan una idea de lo que está pasando. Aquí hay una muy buena nota sobre la ley de medios audiovisuales: http://www.perfil.com.ar/ediciones/2012/12/edicion_735/contenidos/noticia_0084.html.
Aunque, pensándolo bien, no ayuda al kirchnerismo el hecho de que el enemigo de la democracia haya sido su aliado. Cómo explicar que los defensores de la democracia hicieron tratos con los destituyentes, incluso aprobaron la fusión de Cablevisión (sin entrar a analizar qué hizo cada uno de los involucrados durante la dictadura)? Eso no le quita validez por supuesto a la ley de medios, pero sí debilita la superioridad moral que el kirchnerismo se quiere arrogar.
Tal cual, y al mismo tiempo que, adentrándose en los entretelones del negocio, la superioridad moral del gobierno flaquea, también se hace más lógico pensar que el adversario pueda no ser "tan destituyente" después de todo (a pesar, mal que nos pese, la evidencia puesta en el tapete por Becerra).
Bueno, era proverbial decir Clarín con tres tapas tira un gobierno. Ya van decenas de miles creo según un cálculo de 678, y sin embargo, por suerte, el kirchnerismo sigue. El kirchnerismo es un fenómeno contradictorio por definición.
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