El Interpretativismo Dworkiniano Ataca de Nuevo

El interpretativismo dworkiniano podría hacerse muy fuerte en los restaurantes de Palermo, en donde se ha puesto de moda la creatividad en los símbolos usados en las puertas para indicar a qué género sexual corresponde el baño de la puerta en cuestión. La creatividad ha hecho que al menos a un integrante de esta cátedra, el infrascripto, le haya insumido literalmente varios minutos tratar de desci ...frar cuál era el baño de hombres (por las dudas, el baño era buscado en aras de vaciar el contenido de la propia vejiga, y para nada más); a tal punto, que bien pudo haberse orinado--si es que no lo hizo o llegó a humedecerse--antes de descifrar el significado del símbolo usado para designar el baño, lo cual si bien quizás incrementa el valor estético del signo frustra obviamente el propósito del baño. A la sazón, y literalmente luego de varios minutos, resultó ser el caso que lo que indicaba el baño de hombres era un cierre cremallera pero fuera de todo contexto (quizás sea un buen indicador de una mercería, pero incluso las mujeres usan ropa con cierres cremallera; quizás el error fue buscar el baño de hombres y no el de mujeres, el cual era indicado por una boca pintada--de todos modos, hoy por hoy eso no significa mucho, por así decir, para disitnguir entre los géneros). Ciertamente, una persona menos interesada por la cultura y sus requerimientos y más interesada en vaciar el contenido de su vejiga, no habría tenido este problema. Oh tiempos en los que en la puerta del baño de hombres decía "hombres", o "caballeros"! Fuera de Palermo, sin embargo, el interpretativismo dworkinianio sigue siendo débil.