En medio de tanta discusión efímera sobre la economía, es refrescante que en dos entrevistas recientes, el Secretario para el Pensamiento Nacional, quizás sin proponérselo, haya revelado la estructura masónico-trinitaria de su pensamiento. En efecto, es fácil de advertir la manera en que el Secretario apela frecuentemente a la trinidad para revelar su pensamiento. Por ejemplo, tomemos la entrevista del domingo en Página 12 (los corchetes son nuestros):
- "El nombre [de la Secretaría] [1] tocó sensibilidades, [2] movilizó ciertos fantasmas, [3] provocó reacciones".
- "'Pensamiento nacional' es un nombre [1] polisémico, [2] equívoco, [3] complejo".
- "Lo nacional hoy en la Argentina es muy difícil de categorizar desde una sola perspectiva. ¿A Borges cómo lo colocamos? [1] ¿Como un escritor cosmopolita sin raíces? [2] ¿Como un escritor del criollismo vinculado a su Palermo natal o a los relatos de Guillermo Hudson o de Güiraldes, o lo vinculamos con su descubrimiento de Herder, de Keats, de Whitman o de Schopenhauer? [3] ¿O es todas las cosas al mismo tiempo?"
- "Lo que hay son [1] giros, [2] invenciones, [3] sentidos en disputas y eso nos plantea la dificultad de pensar la Argentina".
Por supuesto, cualquiera puede tener un día triádico, y quizás las respuestas en esta entrevista hayan sido sólo una casualidad. Pero hete aquí que en otra entrevista (click) reaparece la estructura masónica, la cual a la sazón, es la misma que la del vals y sobre todo del pericón nacional (un, dos, tres):
- "darle a la cultura ese lugar de gabinete ministerial permite una serie muy poderosa de [1] acciones, de [2] reconocimientos y de [3] legitimidad".
- "Esto implicaría dejar afuera a todos aquellos modos de la creación cultural [1] que no son inmediatamente rentables, [2] que no son un negocio, [3] que no están en el 'main street' de la creación cultural".
- "Un Ministerio de Cultura básicamente protege... a aquellos que con enorme esfuerzo sostienen esa trama de la creación cultural y que no tienen como objetivo [1] el negocio, [2] la construcción mercantil o [3] la rentabilidad".
- "La verdad que las actividades que estamos planeando son [1] diversas, [2] múltiples y [3] con mucha intensidad".
- "yo creo que el nombre que decide desde la Presidencia de la Nación para esa Secretaría tiene esa potencia. Porque es un nombre que produce [1] escozor, que produce [2] interrogación, que produce [3] rechazo también".
Por si esto fuera poco, Forster nos ha legado una frase para reflexionar (no es la primera vez que el Secretario nos deslumbra con su sutileza: que el árbol no tape el Forster) como respuesta a la pregunta acerca de por qué "la derecha mediática atacó" la creación de su Secretaría:
"se combinan dos cosas. A veces los nombres tienen dos posibilidades: o pasar desapercibidos, no producir ningún efecto; o tener la potencia de generar efectos. Y yo creo que el nombre que decide desde la Presidencia de la Nación para esa Secretaría tiene esa potencia. Porque es un nombre que produce escozor, que produce interrogación, que produce rechazo también".
En otras palabras, (1) que los nombres producen efectos o no lo hacen, a primera vista parece ser una obvia tautología, algo así como decir que el mundo se divide entre los que conocen al Gallo Claudio y los que no lo conocen, pero no lo es porque Forster sutilmente, casi de manera inadvertida, califica su aserto mediante el adverbio "a veces". En cambio, las tautologías, como la la división que provoca el Gallo Claudio, se cumplen necesariamente.
Y (2) la respuesta según la cual la Secretaria es rechazada porque produce rechazo, no es otra inane tautología como parece, sino una velada referencia a aquella virtus dormitiva de Molière, que tiene la virtud de producir sueño porque precisamente da sueño, y da sueño porque tiene la virtud de dar sueño. En otras palabras, se trata de otra muestra del fino sentido del humor que tanto bien le hace al pensamiento.
Finalmente, quisiéramos aprovechar esta ocasión para insistir en que, como bien dice Forster en Página 12, su secretaría no es nazi, y no lo es por una muy sencilla razón: los nazis no tuvieron una secretaría para el pensamiento. A Heidegger le habría hecho mucha gracia semejante idea.
Discrepo, estimado Profesor Rosler, respecto de que la estructura profunda del pensamiento nacional estratégicamente coordinado sea masónica, lo mismo que el trinitarismo del Profesor Dr. Richard Forster: es teológico-política. La masonería es demasiado sospechosa de "racionalismo" y, como es de público conocimiento, el pensamiento nacional es "rosista", i. e., partidario de la Restauración y de los pensadores reaccionarios y contrarrevolucionarios, y aun de Gaspard de Réal De Curban, quienes sospechan y denuncian a la masonería como los agentes encubiertos de la demoníaca revolución burguesa. En efecto, el Coordinador Estratégico es un teólogo confeso y como Ud. mismo lo ha descubierto, un teólogo del misterio de la Santísima Trinidad. Desde antes de su metanoia al nestoranismo patagónico ya era un teólogo -y no un filósofo- que se ocupaba del judaísmo y de otras cuestiones de impronta religiosa. Ahora mismo nos amenaza con un libro de 500 páginas sobre otro teólogo político confeso, W. Benjamin; y no contento con la teología, lo quiere vincular directamente con la religión, a saber, el judaísmo. Sin embargo, la prueba más evidente de que el pensamiento nacional estratégicamente coordinado es teológico es que cree con irracional fervor en el kharisma de la charismatische Führerin...
ResponderEliminarGL
Estimado GL: muchísimas gracias por este esclarecido comentario que desnuda nuestra ignorancia acerca de la masonería. En efecto, lo único que sabemos sobre ella es que inspira La Flauta Mágica, tal como se nota en las repetidas estructuras triádicas de la obra (las tres virtudes, las tres preguntas, tres templos, tres damas, tres niños, tres acordes mayores en la obertura, etc.). Y sobre todo por indicar la incompatibilidad entre la masonería y el pensamiento nacional entendido a la vieja usanza, antes de que la cábala llegara al Gobierno (imaginamos cómo se debe sentir los cultores del pensamiento nacional en este momento, sacudidos por la ironía del destino). En nuestra defensa podemos decir que entendemos a la masonería entonces en términos fundamentalmente, aunque asimismo sólo parcialmente (por lo que acabamos de decir), estructurales antes que genealógicos y teleológicos. No sé si estamos de acuerdo en que la Secretaría no es nazi, ya que los nazis no tuvieron Secretaría alguna para el Pensamiento.
ResponderEliminarUsted lo ha dicho: Heidegger (el autor de Was heisst denken/danken?) se hubiera "muerto" de risa (esto de morir de risa es obviamente, un eufemismo). Debiéramos jurar como los dioses por la laguna Estigia no confundir jamás a Forster con Heidegger.
ResponderEliminarGL
Pensándolo bien Heidegger hablaba de "Holzwege", caminos que no conducen a ningún lado, y dichos caminos estaban en el bosque, cuyo cuidador o guardabosque es literalmente Förster.
ResponderEliminarEs cierto, pero las coincidencias no se limitan a ésas. El papito de Heidegger era ein Küster, ein Mesner, es decir, un Kirchner: ¡igualito que Forster!
ResponderEliminarTodo esto sin ir a lo sustantivo: cuando se traduzca al alemán el último libro del Führer de los pensadores nacionales, i. e., La travesía del abismo, seguramente se lo verterá como Der Weg des Abgrunds. ¡Qué titulo tan heideggeriano!
GL
Estimado Andrés: Por su CV y su pluma uno no puede dudar de su inteligencia o al menos de su nivel de instrucción. Forster nos da mucho material para pegarle y mucho otro tanto que deberíamos respetar. Particularmente prefiero más Forster y menos Miguel del Sel, por poner un ejemplo. Sin embargo hacerle una crítica por ser su pensamiento masónico, y para colmo aventurar la suposición y el prejuicio en la estructura triádica de la nota es, a mi parecer, una pavada. No todos tenemos la oportunidad de formarnos en casas de estudio como en la que usted lo hizo. Tal vez sería bueno, teniendo acceso a medios masivos como Infobae, que nos traiga luz sobre los muchos temas que sin duda nos puede traer a los humildes lectores promedio. Lo animo a leer los rituales de la Masonería si el tema le interesa. Podrá encontrarlos en toda la web y en la biblioteca del Congreso de la Nación. Ahí verá su análisis lo único que dice de la Masonería es que el 3 ocupa un lugar importante, como para tantas otras tradiciones inciáticas. Pero de Forster, la secretaría de pensamiento Nacional y demás yerbas solamente comprobará que fue una ilusión aventurada y prejuiciosa de su parte.
ResponderEliminarLe envío tres saludos.
Gonzalo, muchas gracias por el comentario. Decir que alguien es masón no es una crítica, al contrario. Entiendo además que los masones usan el número 3 en sus iniciaciones, pero dudo que lo usen en su pensamiento. Y sospecho que hasta los masones se deben reír de alguien que cree que pensar consiste en dar tres adjetivos (o más). Y también sospecho que así como existe un humor judío en el cual los judíos se ríen de sí mismos, otro tanto debe hacer los masones. Forster ocupa una Secretaría inexplicable, pythonesca: http://lacausadecaton.blogspot.com.ar/2014/06/secretaria-pythonesca.html. Y su pensamiento público es muy extraño: http://lacausadecaton.blogspot.com.ar/2014/05/que-el-arbol-no-tape-el-forster.html.
ResponderEliminarQuisiera aclarar, por las dudas, que Infobae quiso reproducir una entrada del blog. También es muy revelador que el único argumento que mencionás a favor de la Secretaría y del Secretario es Del Sel. No es una elección lo que está en juego (Del Sel o Forster, y Dios nos libre de semejante elección) sino qué hacer con el Estado. La Secretaría además se financia con fondos del erario público, con un sueldo bastante alto (creo que unos 40.000 pesos, y aunque fuera gratis tampoco tendría mayor sentido).
ResponderEliminarInstrucciones para detectar masones con el Método Rosler®
ResponderEliminarBusque las ternas que puedan aparecer en cualquier texto. Con una pizca de bueno humor (solamente una pizca) usted podrá encontrar masones ocultos hasta en los lugares más difíciles. Acá le damos unas ideas para que vaya comenzando. Todo es cuestión de empezar a tirar de una palabra o frase para descubrir la presencia del número tres. Conocerá usted un nuevo mundo de sensaciones.
Convenientemente modificado, el Método Rosler® podría servir para detectar jacobinos, radicales y taquígrafos.
Padre, Hijo y Espíritu Santo
Yo te detecto un masón en tres patadas.
3/4, 6/8, 9/8 12/8 los ritmos ternarios en música
Un dos tres, coro coronita es.
A la una, a las dos, y a las....!tres!
No hay dos sin tres.
Tome esta pastilla tres veces al día durante tres meses.
Fulano, Mengano y Zutano.
Tres morillas me enamoran en Jaen, Axa, Fátima y Marién (Cancionero de Palacio)
Si habrá en este baldrés, mangas para todas tres (Cancionero de Palacio)
La tercera es la vencida.
NH3 (el amoníaco)
Aceite 3 en uno Limpia, lubrica y desincrusta.
Jugo 3 en uno: Naranja, zanahoria y remolacha.
Triángulo amoroso.
Las ternas pitagóricas, o sea aquellos tripletes (a,b,c) que cumplen a²+b²=c²
Teorema de Thales: Si tres o más paralelas con cortadas por dos transversales,...
Enseñanza primaria, media y terciaria.
En un segmento: sus extremos y el punto medio.
Los tres chiflados.
Piano, violín y cello.
La Santa María, La Niña y La Pinta.
Los molares de la fórmula dentaria en el adulto.
Las trillizas de oro.
Sonidos agudo, medio y grave.
Frío, caliente y templado.
Las medialunas: grandes chicas y medianas.
Palancas de primero segundo y tercer género
Ácidos bases y sales.
El cine. (Tiene tres funciones: matinée, vermouth y noche)
Ese es exactamente el punto: pensar no es decir tres (o más) cosas juntas.
ResponderEliminar1 + 1 = 2
ResponderEliminarAl amado vice le faltaría uno más y se recibiría de masón.
¿es cierta la leyenda medieval, puesta en circulación por el Vaticano, sobre la ceremonia de iniciación masónica, luego imitada por nuestra mazorca? Creo que el amado debe estar ya experimentando algunos síntomas.
Buen punto, el fatídico número 3. ¿Cuál es la leyenda?
ResponderEliminarLa leyenda dice que a los que querían ingresar en la masonería, en la ceremonia de iniciación, entre los variados ritos, estaba el de introducir un falo de hierro, allí... como una manera de degradar al aspirante y tenerlo sometido para que nunca revelare que era un masón.
ResponderEliminarNuestros simpáticos mazorqueros, podrían haberse inspirado en ello cuando cantaban estas décimas:
"Viva la Mazorca!
Al unitario que se detenga a mirarla
Aqueste marlo que miras
de rubia chala vestido,
en los infiernos ha hundido
a la unitaria fracción."